viernes, octubre 17, 2003

Para salvar lo espontáneo de alguién, hay que accionar los encantos que tiene uno, es en esos momentos donde puede darse lo tanto esperado, un enlance de almas que se encontraban no motivadas por el amor convenido, y es ahí donde los corazones paracen que ya revientan en cada palpitación, es el amor que está llegando y llenando todos los elementos que tenemos en nuestro ser. Por esto, aquí estoy para ti, mi amor eterno, canalizando las energías que nos van surgiendo a cada paso, a cada hora y en cualquier lugar, mejor si es uno especial para los sentimientos que complementamos, es maravilloso conocerte y poseerte, y ver que todo en nosotros florece y haremos de éste un fruto fusionado y de verdadero saber.
Hay algo en lo obscuro de mis sensaciones que vomita pensamientos inútiles intranquilizadores y hay algo en lo brillante de mis sensaciones que sostiene levemente la intranquilidad de mi sistema pero logra potenciar mis expresiones externas, es desastroso accionar de esta manera, todos mis sentidos apenas se mueven para realizar lo mínimo de un esfuerzo que mueve a los demás. Es claro, estoy incompleto porque no te encuentras a mi lado, ¡donde estás!, amor preciado, ven a mi costado, ya no puedo vivir así, te necesito más que nunca y siento que tu pasas por lo mismo, que crueles van nuestros caminos, que se juntarán cuando menos lo esperemos pero desde ese momento ya no, nos despegaremos y seremos un mundo paradisiaco que con todos los demás compartiremos, es el encuentro para nuestro amor perfecto.

sábado, octubre 04, 2003

¿tú, lo juegas?

De repente cojo al tiempo, suelo, aire, objetos y
a ti te los entrego y haces de ellos momentos libres,
y ahí nos juntamos y jugamos, apostando broches de pasión,
las suertes las tiramos y a la punta llegamos,
los descansos son cortos por la prisa de los otros,
no hay confusiones, el mundo es perfecto,
y por eso tropiezo y atraviezo tus nuevas entradas,
es el sitio movedizo del punto vial,
señal de que volvamos a jugar al amor ideal.
Como te amo más, es en ese lugar que te quiero ver,
sí!, tengo muchos corazones para obsequiarte, bella;
provócame en todo momento, a toda hora y,
si te quiero sudo frío y estoy caliente por dentro
y esperando un nuevo beso y cojidos, para nunca
jamás separarnos, que gran historia de amor eres,
amada cría; oh, mujer mía y solo mía.
*** TU y YO ***

ADAL, ella te hace resplandeciente
claro que sí, acceso a su sistema;
sus flujos rosales atolondran y
complementamos plenamente.

Los tiempos que tenemos
espejan sentimintos de dioses;
te anhelo y respondo lo que quieras.